Reza, espera y no te preocupes. La preocupación es inútil. Dios es misericordioso y escuchará tu oración. -Padre Pío de Pietrelcina Desde muy pequeñito el …
Testimonios de sanación por la intercesión del padre Pío – parte 1
«A menudo levanto la mano en el silencio de la noche y en mi celda solitaria, bendiciéndolos a todos y presentándolos a Jesús y a …